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LA BARBA EN MÉXICO



¡Ah, la ilustre barba! Usado por los hombres más nobles, sabios e independientes. Los hombres de grandes batallas, los líderes a través de los siglos y el hippie común, todos han vestido la barba de una manera u otra.

Hoy en día sigo viendo corporaciones que no permiten que el hombre se exprese libremente. Una cosa que creo sigue haciendo falta con la barba en México es más impulso en el mundo corporativo. Aunque ya la hay, insisto que falta mas impulso. Pero ¿qué pasa con los líderes corporativos de nuestros días? Ellos hasta hace poco (unos 3 años), dejaban su cara suave y bien afeitada, sin preocuparse del vello que crece en sus rostros. No quiero decir que la apariencia afeitada y limpia es mala para un hombre, sin embargo los modelos que hasta hace unos años atrás nos guiaban a cambiado. Ahora, la tendencia de las barbas no termina y sigue despertado un sentimiento colectivo más elevado. Aunque en México seguimos teniendo mucha gente que nos discrimina por nuestro aspecto y nos ven como el delincuente, un vago, o un muchacho sin beneficio.


Estamos ya más allá de la moda, actualmente en México estamos cada vez más cerca del cambio de la barba. Muchas celebridades ahora se dejan barba hasta en los momentos más importantes. Películas muy emblemáticas como Harry Potter retratan a los villanos como limpios y afeitados mientras los adorables héroes suelen ser barbudos.

Un estudio de hace 3 años muestra que las mujeres prefieren a los hombres con barba sobre un hombre afeitado limpio. Claro, no todas pero a la mayoría y en el fondo les agradaría. Pero no quiero pasar demasiado tiempo hablando de eso. De lo que quiero hablar es de ti, siendo un hombre. No hay necesidad de disculparse por ser un hombre.


Hay millones de hombres trabajando en cubículos, laboratorios, oficinas y en el campo que desean dejarse la barba pero le siguen temiendo a la sociedad. Para esas personas, que muestran ser temerosas no es ser uno mismo. Si quieres dejarte la barba, entonces hazlo - no dejes que tus demonios internos te contengan.

He sido de barba desde hace 3 años pasando por mi carrera profesional en varios estilos y longitudes. Estoy seguro de que la gente me ha juzgado a causa de mi barba, o quizás mis calcetines, o mi pelo, o mi ropa, o incluso mi altura y peso - pero no puedo parar eso. Sin embargo, cuando me voy a la cama por la noche puedo dormir bien sabiendo que el mundo que muestro soy yo y no una concha de lo que la sociedad quiere que yo sea.

Así que si estas ya convencido a dejarte la barba, la próxima semana te daré una lista rápida de sugerencias para ayudar a esa transición.

Hasta la próxima barbones y recuerden... ¡déjenla crecer!

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